(Algunos ineludibles compromisos laborales y varios inconvenientes imprevistos con el hardware han provocado que no haya podido mantener el blog al día en las últimas dos semanas. Me consta que las crónicas pierden su valor si se publican con retraso, pero con la buena fe de que al menos queden registradas a modo de archivo, publico a un tiempo las de las últimas tres jornadas. Disculpen las molestias.)
Las 'crónicas de la jornada' se referirán a lo más destacado que haya pasado la semana anterior en el fútbol, pero no sólo a los resultados ni tampoco a todos los resultados. No puedo ver todos los partidos y por eso tampoco analizarlos uno por uno. Pecaré de poco original, pero hay que ofertar lo que se demanda y vivimos en un país bipolar. Un polo es el Barça y el otro polo es el Madrid. Por suerte para el fútbol y los futboleros de bien, los que amamos al balón por encima de nuestros escudos, la temporada pasada, y después de muchos años, apareció una tercera vía: el Atlético de Madrid. No sólo volvió al lugar que le corresponde por historia, por plantilla y por presupuesto hace un par de temporadas, el 3º, sino que además el año pasado, contra todo pronóstico, se convirtió en el ganador de la competición de la regularidad. Así que con todos los respetos que merece el campeón, este será, junto con Barça y Madrid, el equipo a analizar. Aunque huelga decir que comentaremos cualquier hecho, anécdota o resultado destacado con el que nos sorprenda el fútbol español. Lo haremos, como mandan los cánones, en el orden en el que acabaron la temporada pasada, que además es el alfabético: 1º Atlético, 2º Barcelona y 3º Madrid. (Cuando sea una jornada con partidos de selecciones, analizaremos lo que haya hecho España.)
ATLÉTICO: -Celta: El conjunto colchonero, que por fiable y competitivo algunas veces gana siendo peor, bastantes igual y muchas sólo ligeramente mejor que su rival, esta vez probó de su propia medicina. Se adelantó el Celta con una genialidad de Pablo Hernández, empató el Atlético con dos jugadas marca de la casa de Miranda y Godín, una de las mejores parejas de centrales del mundo y sin duda la más goleadora, y tras la remontada rojiblanca y después de ofrecer los locales un mejor juego y disponer de más y mejores ocasiones, el conjunto vigués empató de penalti por medio de Nolito. Eso sí, la pena no fue total, al menos se empató. (2-2). Los de El Cholo llevan más de un año sin perder en casa en competición oficial. Impresionante.
-Almería: Volvió el Atlético de casi siempre. Por si alguien tenía dudas, por el partido anterior, de si los rojiblancos habían perdido sus señas de identidad, este partido las despejó del todo. Encuentro complicado en campo pequeño ante un rival correoso. El nivel de los locales era menor pero la importancia del partido, después del 'pinchazo' en casa, era más que mayor, superlativa. Y el equipo de Simeone hizo lo que mejor sabe hacer: meter un gol a balón parado (Miranda, otra vez) y defender como jabatos. Tres nuevos puntos y a casa (0-1). Este equipo puede cambiar jugadores y variar algún aspecto del juego. La filosofía del equipo es la misma y los resultados, como mínimo, parecidos. Siguen compitiendo y seguirán arriba.
-Sevilla: Cuando parecía que este iba a ser uno de los partidos más igualados de los últimos tiempos entre estos dos equipos, por el fenomenal arranque de temporada y gran racha de resultados de los de Emery, ocurrió todo lo contrario. El entrenador donostiarra quiso innovar metiendo tres centrales y tres hombres arriba, tal vez buscando un juego más directo, y no pudo salirle peor. Koke abrió el marcador con su guante tras recoger un rechace en la frontal mediado el primer tiempo. Al filo del descanso, el canterano Saúl se estrenaba como goleador rojiblanco en una jugada que demostró que la altura del rematador tiene una importancia relativa cuando los movimientos en la estrategia están tan milimetrados como los que dibuja el míster argentino en su pizarra. A partir de ahí, un quiero y no puedo del Sevilla que apenas llegó a inquietar a Moyá y que vio como un marcador claramente adverso se convertía en una dolorosa goleada en los últimos diez minutos al redondear los colchoneros el marcador por medio del capitán Raúl García de penalti y al rematar Raúl Jiménez, también en su estreno como goleador atlético, otra falta lateral. (4-0). El Atlético pone tierra de por medio con uno de sus rivales en la pelea por la clasificación para la Champions y deja el goal average particular practicamente sentenciado con los sevillistas. En El Calderón pocos puntúan y ninguno gana.
BARCELONA: -Levante: Partido sin historia que se resolvió antes del descanso. Los visitantes lo dominaron de principio a fin. Neymar adelantó a los culés y poco después el arbitró se 'cargó' el partido al pitar un claro penalti y señalar una exagerada expulsión a Vyntra. Messi falló el lanzamiento, pero luego, con el mediocentro de Terrassa una vez más en el banquillo, Rakitic se estrenó como goleador con el Barça con un golazo que sentenció a un rival que remaba a contracorriente y con diez. La segunda parte sólo sirvió para que el Levante tratara de encajar los menos goles posibles mientras que el Barça intentaba aumentar la cuenta en su casillero. Entre unos esfuerzos y otros, nada más o nada menos que 'cayeron' tres. El grancanario Sandro, que también se estrenó como goleador blaugrana, su paisano Pedro y el desquite del penalti de Messi redondearon la goleada. (0-5). A la fiabilidad defensiva demostrada desde que comenzó la temporada, el conjunto blaugrana añadió una efectividad no vista hasta la fecha. Firme líder de la liga.
-Málaga: No sólo fue el peor día del Barça en lo que llevamos de temporada, sino que además fue un bodrio de partido. El Málaga se dedicó a guardar el sitio en previsión de un juego dominador de los visitantes que nunca se acabó de producir y temiendo una oleada de ocasiones que ni por asomo llegó. Es más, ojo al dato, el Barcelona no tiró ni una sola vez entre palos. Un dato escalofriante que no se producía desde hacía más de diez años. De hecho, la ocasión más clara del partido la tuvo el conjuto malacitano y se produjo en una falta botada por Luis Alberto, canterano barcelonista, que entre Bravo y el palo evitaron que entrase. Douglas debutó al mal nivel de todo el equipo, Messi lo intentó sin acierto y Xavi no tuvo ni siquiera un minuto para ayudar a que el juego fluyese. Así las cosas, con unos sin querer atacar y otros sin poder, la suma de esfuerzos dio como resultado un partido tan aburrido o más de lo que refleja el marcador (0-0). Mirando el lado positivo, los andaluces sumaron un punto con el que 'no contaban', mientras que los catalanes siguen con la portería imbatida mientras se mantienen en lo alto de la tabla.
-Granada: Set en blanco en el Camp Nou. Resultado 'semiengañoso' a tenor de lo visto en la primera media hora de juego, en la que el Barça sólo pudo adelantarse por medio de Neymar y no demostró gran superioridad. Parecía que así se iba a llegar al descanso, pero entonces empezó el festival Messi, que acabaría el partido con dos goles y dos asistencias. Empezó regalándole el 2 a 0 a Rakitic, que esta vez sí, acompañado por el motor del fútbol en la medular, cabeceó una jugada individual de Leo por la banda para anotar su segundo tanto consecutivo en liga con los blaugrana. El '11' culé aprovechó un rechace para 'matar' al Granada antes del descanso. De ahí hasta el final, el conjunto andaluz no supo ni por dónde le venían, y en la última media hora encajó otros tres goles, los que suponían el doblete del argentino y el hat trick del brasileño, asistido por el '10'. Conectó como nunca la pareja de cracks del Barça y de ahí la goleada. (6-0). Da miedo pensar en lo que pueden hacer estos dos cuando se les una Luis Suárez, si acaban por entenderse los tres. El Barcelona sigue sin recibir un solo gol y dominando con puño de hierro la clasificación de la liga.
MADRID: -Deportivo: El Real demostró en Riazor todo lo malo que tiene y todo lo bueno que es: un equipo con escasa organización defensiva y carente de juego colectivo que sin embargo solventa estas deficiencias con talento individual a raudales y la mayor pegada del mundo del fútbol. Cristiano consiguió su enésimo hat-trick, James hizo su mejor partido de blanco, golazo incluido, y Bale y Chicharito hicieron sendos dobletes como quien no quiere la cosa. El conjunto merengue pudo marcar alguno menos y el blanquiazul alguno más, pero en cualquier caso los visitantes pasaron por encima de los locales más o menos como se reflejó en el marcador (2-8). Ancelotti sigue teniendo trabajo que hacer en lo referente al juego en equipo y la parcela defensiva, pero en ataque casi parece ser tan simple como darles la camiseta y decirles que hagan lo que saben. Si hasta los suplentes golean a pares...
-Elche: Partido que comenzó con el anecdótico gol del Elche al transformar Edu Albácar un penalti. A los cinco minutos Bale empató y, en buena lógica, los visitantes se echaron atrás temiendo perder también el punto que otorga el empate. Pero 'noventa minuti nel Bernabéu son molto longo' y más si en el local juega el mejor goleador del mundo. Lo que vino de ahí hasta el final fue una exhibición de el crack portugués, que demostrando lo que significa cuando tiene la puerta de cara, metió los cuatro siguientes -y últimos- goles del partido. Los repartió marcando dos en cada parte. Y por si fuera poco, de tres formas diferentes: dos de penalti, que hay que meterlos, uno de cabeza y el que falta con la zurda, su pierna menos buena. Típico partido del Madrid en casa contra un rival de la parte baja. Sin necesidad de hacer un juego arrollador ni salir totalmente concentrado (no es ni mucho menos la primera vez que empieza perdiendo ante un equipo menor para luego remontar), se basta y se sobra con su calidad individual y su poderío goleador para poner tierra de por medio y ganar los partidos 'cuando y como quiere'. (5-1). Ancelotti debe seguir trabajando la cohesión del grupo, pero mientras no lleguen los partidos clave de la liga ni la fase decisiva de la Champions, va sumando puntos y goles al casillero gracias a su increíble eficacia ofensiva.
-Villarreal: El Madrid se encontró con el primer 'test' serio de la temporada y no falló. El Villarreal, como siempre, quiso el balón, intentó jugar al fútbol y, especialmente en su campo, creó ocasiones. Pero ante la igualdad reinante en el juego y en el marcador, apareció, una vez más, la calidad individual, A la media hora, Luca Modric, que ha metido sus 7 goles como madridista desde fuera del área, sorprendió a Asenjo con un zapatazo seco desde la frontal. Poco después, una genialidad de Benzema, que tiene menos gol que muchos delanteros pero más calidad que casi todos, dejó un balón franco para que Ronaldo, el de siempre, pusiera la puntilla en el marcador. En la segunda parte, el cuadro merengue demostró haber aprendido la lección de San Sebastián y se dedicó a contemporizar y a asegurar el marcador. (0-2). Parece que los pupilos de Ancelotti crecen en juego al tiempo que mejoran sus resultados. Una vez más y como siempre, será candidato a todo, hasta el final estará el Real.
