jueves, 6 de noviembre de 2014

CRÓNICA DE LA JORNADA 10


Las 'crónicas de la jornada' se referirán a lo más destacado que haya pasado la semana anterior en el fútbol, pero no sólo a los resultados ni tampoco a todos los resultados. No puedo ver todos los partidos y por eso tampoco analizarlos uno por uno. Pecaré de poco original, pero hay que ofertar lo que se demanda y vivimos en un país bipolar. Un polo es el Barça y el otro polo es el Madrid. Por suerte para el fútbol y los futboleros de bien, los que amamos al balón por encima de nuestros escudos, la temporada pasada, y después de muchos años, apareció una tercera vía: el Atlético de Madrid. No sólo volvió al lugar que le corresponde por historia, por plantilla y por presupuesto hace un par de temporadas, el 3º, sino que además el año pasado, contra todo pronóstico, se convirtió en el ganador de la competición de la regularidad. Así que con todos los respetos que merece el campeón, este será, junto con Barça y Madrid, el equipo a analizar. Aunque huelga decir que comentaremos cualquier hecho, anécdota o resultado destacado con el que nos sorprenda el fútbol español. Lo haremos, como mandan los cánones, en el orden en el que acabaron la temporada pasada, que además es el alfabético: 1º Atlético, 2º Barcelona y 3º Madrid. (Cuando sea una jornada con partidos de selecciones, analizaremos lo que haya hecho España.)


ATÉTICO: Después de la bochornosa historia de la gala de la LFP, el Atlético de Madrid se reencontró con su verdadero 'premio', que como bien dijo El Cholo Simeone, son los más de 50.000 fieles que se congregan cada quince días a orillas del Manzanares para llevarlos en volandas. Ovación cerrada para los rojiblancos a su salida al campo y mensajitos varios con pancartas contundentes para Tebas. Y hablando de fútbol, lo de casi siempre; cuando los rojiblancos juegan en casa, mandan en el campo, no fallan en el partido y ganan en el resultado. Después de toda una primera parte de dominio, Griezmann venció la resistencia cordobesa, abrió la veda de la goleada y estrenó su casillero goleador de la temporada, todo ello con la colaboración de Luso, que desvió el remate del francés. Sucedió apenas dos minutos antes del final del primer tiempo, y al contrario de lo que es costumbre, no tuvo ese famoso efecto psicológico en contra del que lo encaja. O al menos no inmediatamente, porque si bien es verdad que los visitantes empataron a los 8 minutos de la reanudación por  medio de Ghilas, tan sólo cinco después el ex realista volvía a poner por delante a los suyos a pase de Juanfran. Un cuarto de hora más tarde, Koke, que había puesto el balón del córner que originó el primer gol, sacó del otro lado para que Mandzukic cabeceara el tercero de la sentencia y acabó por colgar al área el centro del que vino el cuarto, que buscaba a Raúl García pero que que fue obra de Pinillos en propia puerta, en lo que sería la tercera asistencia de la noche del canterano madrileño. Ya con todo resuelto, Ghilas completaba un doblete 'inservible' para dejar un alegre marcador con seis goles. Llevaba el Atlético tres años sin encajar un gol de córner en El Calderón y mucho sin recibir dos goles en casa , pero la estadística que vale es la de no perder y lo que cuenta de verdad es ganar y sumar de tres en tres. Una victoria más, 4-2. En la liga más igualada de la última década, el vigente campeón sigue en la pelea, a un punto del líder


BARCELONA: Al Barça se le juntó el hambre con las ganas de comer. El hambre fue el que pasó en el Bernabéu, donde no se comió un rosco, y las ganas de comer(se) al Celta se las tendrá que guardar para la próxima jornada, en lo que a ganar se refiere, y para la segunda vuelta en lo que respecta al conjunto vigués. Es muy inusual que un equipo grande, y sobre todo uno de la liga española en la que tanta diferencia hay entre los tres primeros y el resto, pierda dos partidos seguidos. Pero además, si tenemos en cuenta que el primero de ellos fue ante el máximo rival, siendo claramente superados y por lo tanto muy merecidamente, pero el segundo es en casa contra un equipo 'menor', con toda la mala suerte del mundo y por lo tanto inmerecidamente, resulta especialmente doloroso. Porque el Barcelona no hizo un gran partido ni desplegó un juego espectacular, eso es cierto. Pero no recuerdo, en los más de 20 años que llevo siguiendo a los blaugrana, ni un solo encuentro en el que se estrellasen hasta cuatro remates en los palos para acabar sin marcar ningún gol y, peor que eso, viendo cómo el portero rival hacía el partido de su vida, encajando uno y perdiendo el partido. Con todo y con eso, hay que darle al Celta el mérito que merece, porque uno no gana en el Camp Nou, y menos tras 73 años sin hacerlo, si no hace muchas cosas bien. Tuvieron menos posesión y muchas menos ocasiones, como es lógico y normal, pero aguantaron el tipo en todo el campo y fueron determinantes donde hay que serlo: en las áreas. En la propia, con la ya mencionada actuación estelar de Sergio Álvarez. En la rival, a través del gran entendimiento que existe entre una de las mejores parejas delanteras de la liga, la formada por Nolito y Larrivey. A los 10 minutos de la segunda parte, el gaditano, que volvía 'a casa', se inventó un taconazo de lujo que sorprendentemente parecía estar esperando el argentino, como sabedor de que su compañero de ataque era capaz de eso, para controlar y acto seguido definir en lo que a la postre sería el gol de la victoria. El conjunto culé, sin los clásicos Xavi e Iniesta, estuvo desdibujado en medio campo, donde Busquets, que a sus problemas de pubis le suma el no acabar de acoplarse a sus nuevos compañeros, sigue mostrando una alarmante baja forma, Rafinha probablemente es un jugador poco hecho para llevar el peso del juego de un grande y Rakitic, el mejor centrocampista de largo en lo que llevamos de temporada, pareció menos seguro que otras veces, tal vez habiendo perdido confianza en sí mismo tras su inesperada suplencia en 'el clásico'. En defensa, el equipo local volvió a mostrar las dudas no ya de esta temporada, sino de las dos últimas, desde que Puyol dejó de participar de forma asidua en los partidos. Con Vermaelen lesionado hasta 'Dios sabe cuándo' y Piqué dando un rendimiento que le ha llevado a la grada, Bartra debe dar un paso al frente y Mathieu conservar la solidez que había mostrado como central zurdo hasta el partido del BernabéuMessi está recuperando su mejor versión y Neymar en racha goleadora y más que adaptado, ya sólo queda esperar a que Suárez coja la forma para que el Barça tenga, probablemente y con permiso de la 'BBC', la mejor delantera del mundo. Y al portero del récord del inicio de la liga no se le puede pedir más. Pero entre la defensa y el centro del campo hay mucho que trabajar y mucho que corregir. Se mereció ganar, pero no se jugó bien y se perdió, 0-1. Luis Enrique, es tu momento.



MADRID: Una puñetera máquina de jugar al fútbol y de hacer goles. Eso es es el Madrid a día de hoy. Lo segundo, contando con el mejor goleador del mundo, Cristiano Ronaldo, al que acompaña el ariete más generoso del Planeta Fútbol, Benzema y fichando al Bota de Oro del Mundial, James, tiene poco mérito. Como ya dije hace tiempo, es poco más que darles la camiseta y decirles que salgan a jugar. Lo primero, lo de hacerlos jugar como un equipo, sí hay que  ponerlo en el haber de Ancelotti. Y tiene mucho valor. Porque no sólo juegan colectivamente y lo hacen muy bien, sino que además son solidarios y generosos en el esfuerzo. No recuerdo un centro del campo que conjugara, al mismo tiempo, tanta calidad y tanta capacidad de sacrificio como el que forman Modric, Kroos, Isco y James. (Y mantener esta formación implica el sacrilegio de dejar fuera al fichaje más caro de la historia del fútbol y ganador de finales Gareth Bale, pero esto ya es asunto del italiano). Lo que sí es verdad es que de los cuatro mentados del medio campo, ninguno es defensivo. Pero TODOS defienden. Qué bonito es eso. Cuando los 'malos' no juegan es porque no pueden. Cuando los 'buenos' no trabajan es porque no quieren. El míster del Madrid ha conseguido que cuatro 'jugones' se pongan el mono de trabajo para que a su enorme calidad le sumen una capacidad de sacrificio que permita conseguir el equilibrio del equipo. Y ya se sabe que en este juego, el que domina el centro del campo domina el partido. (La verdad es que, tengo que reconocer que para mi sorpresa, a día de hoy ya nadie se acuerda de Xabi Alonso). Y si además tienen la pegada que tienen estos, apaga y vámonos. En lo que se refiere al partido, no tuvo historia. Pocas crónicas voy a tener tan fáciles como esta: el Madrid fue inmensamente superior a lo largo y ancho del encuentro, dio un recital de fútbol, abrumó en posesión y en ocasiones y metió cuatro goles, dos en cada parte. Ronaldo abrió el marcador, para variar, a pase de Benzema, como de costumbre. El portugués se gustó con varios taconazos durante todo el partido, uno de los cuales acabó en asistencia para el gol del francés, el tercero. Antes, James había clavado en la escuadra una volea en forma de vaselina que él mismo incluyó en el 'top 3' de sus  tantos, poniendo el segundo en el electrónico. Después, el propio colombiano redondeó la goleada, 0-4.


A DESTACAR: El Elche consiguió su primera victoria a costa del Espanyol y por medio de un doblete del ex jugador perico Jonathas, qué cosas tiene el fútbol, 2-1. El Levante también estrenó su casillero de triunfos con uno sufrido y trabajado ante el Almería, también por 2-1. La Real volvió a perder, esta vez en casa y contra el Málaga por 0-1, y acabó destituyendo a Arrasate, se veía venir. El Athletic por fin volvió a ganar, nada menos que al Sevilla, haciendo valer por fin el poder de La Catedral. Y mención especial para el Eibar, un recién ascendido que ganó a un rival directo por la salvación y a domicilio, 2-3 en Vallecas.